
Estamos acostumbrados a acudir a consultas para perder peso donde, aparte de darnos a todos la misma dieta, adelgazamos muy rápido (a costa de perder masa muscular en lugar de grasa) pero después volvemos a cogerlo. Este efecto rebote se produce porque son dietas muy restrictivas, no se adaptan a nuestras necesidades y no pueden mantenerse mucho tiempo, y llegan a perjudicar nuestra salud. Con las consultas de control de peso buscaremos ir perdiendo grasa corporal y peso de forma progresiva, sin complementos ni sustitutivos; aprendiendo a comer sano y corrigiendo los hábitos que han podido llevarte a esa ganancia de peso.
En la primera visita, de unos 45 minutos aproximadamente, se realiza una historia dietética, clínica y ponderal. Hablaremos del estado de salud, de la alimentación actual y pasada; los cambios que se han producido en el cuerpo. Si realizas actividad física, cuáles son tus horarios de trabajo/estudios, en qué dedicas el tiempo de ocio y las preferencias alimentarias. Una entrevista completa para diseñar un plan nutricional lo más personalizado posible.
Analizamos la composición corporal mediante el sistema de bioimpedancia, porque lo importante no es el peso total sino cómo se distribuye éste en los compartimentos corporales (masa grasa, masa libre de grasa, agua corporal…).
En las visitas quincenales de seguimiento, además de analizar de nuevo la composición corporal, hablaremos sobre si ha habido dificultad a la hora de seguir la pauta, la adaptaremos de nuevo planificando con un menú semanal y lo organizaremos según las ocasiones especiales…; etc.
